Mausoleo Monumento a Miryam Stefford «El Ala»

El mausoleo de Myriam Stefford, conocido como El Ala, es una construcción monumental que se erige en el paisaje de Villa Parque Santa Ana, como un homenaje a una mujer cuya vida, llena de audacia y misterio, ha dejado una marca indeleble en la historia de la región. Con sus 82 metros de altura, este mausoleo supera en estatura al Obelisco de Buenos Aires, y se alza como un faro para los que transitan por la zona en memoria a una mujer que osó desafiar los límites de su tiempo.

Diseñado por el arquitecto Fausto Newton, por encargo del viudo de Stefford el estrafalario millonario – y por entonces dueño de esas tierras – Raúl Barón Biza, el Ala fue inaugurado el 30 de agosto de 1936, 5 años después del fallecimiento de Myriam Stefford. En su interior descansa la cripta donde reposan sus restos, una mujer que combinó su faceta de actriz y aviadora con un espíritu de lucha incansable por alcanzar alturas, tanto físicas como existenciales. 

La estructura, construida con 170 toneladas de concreto, cuenta con 406 escalones en forma de escalera caracol, como un viaje hacia lo desconocido y lo sublime. Cada peldaño parece desafiar la gravedad, mientras subimos hacia su vértice, coronado por un faro aéreo que nunca iluminó un cielo, y un amarre para zepelines que jamás fue utilizado. 

Como afirmó en vida la propia protagonista de esta historia: “No me importa si algo sale mal porque uno de los mejores logros de mi vida será no haber muerto de forma ordinaria”. Su vida, aunque marcada por la tragedia y el drama, estuvo así siempre guiada por una constante búsqueda de lo extraordinario. 

Hoy, el mausoleo de Myriam Stefford se mantiene en pie como un símbolo de la audacia y el arrobo de una mujer que, en sus propios términos, quiso volar tan alto como las águilas. El monumento se encuentra en Villa Parque Santa Ana, un lugar cargado de historias increíbles que, como la suya,  siguen atrayendo a viajeros y buscadores de lo insólito.